El mensaje fue siempre claro desde que se empezó a pensar la competencia. Solo los pilotos de la ACTC y a libre discrecional de la Comision Directiva, podrían ser parte de la carrera mas importante de la historia del TC.
En los casi 80 años de historia de la categoría, la entidad que maneja los destinos de la misma, en forma directa desde 1979, ha manejado con absoluta y total libertad sus decisiones, casi sin desafió alguno del ACA. Es cierto también que sus presidentes se han caracterizado por figuras férreas y autoritarias, al extremo de tener casi nula oposición y imponiendo la máxima "esto es lo que hay".
"Aca no fallo nada" diría Oscar Raul Aventin y no se equivoca. ¿Como arriesgarse a tener figuras de renombre nacional que puedan opacar "la gran fiesta del TC"?. Que Lopez, Girolami (prohibido), Risatti (parece que no quiso dar un auto al museo del TC) o incluso Guerrieri (que gano la "carrera de las estrellas" junto a Rossi HACE MENOS DE UN AÑO!!!), son demasiado para una fiesta de una divisional que ha elegido a la mediocridad como máxima. De hecho, se expone a poner sin verdadera experiencia, a pilotos que provienen del "semillero" pero vetar incluso a ex campeones de sus categorías como Franco De Benedictis (¿?). La excelencia asusta...
No hay dudas que habrá un marco imponente de publico y figuras importantes del automovilismo nacional, que en realidad están gracias a su permanencia en la categoría. Lo curioso que quien evalúa, y veta a los invitados "no admitidos", volvió a correr y en el mejor de los casos llega a estar a mas de cuatro segundos de la punta, en un auto que puede manejar hasta...el "Kun" Agüero (no es joda).
Es por eso que no se puede esperar de un burro mas que una patada. El "TC" tendrá "su fiesta" el 6 de Agosto. Y siempre fue claro que "la casa se reserva el derecho de admisión o permanencia".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario