miércoles, 25 de abril de 2018

#Opinion Reglamento tecnico del TC, cuando el arbol tapa el bosque (y otras cosas mas...)

No hay caso, el reglamento técnico del TC es y sera un problema, al menos que la categoría cambie su concepción en cuanto a los autos que posee actualmente.

Se hablo y se habla siempre del reglamento, pero el hecho de introducir una considerable modificación técnica para los Ford, a los fines de ponerlos en disputa con las otras marcas abrió, una mas, de las grietas que el reglamento técnico acumula.

Lo curioso seria que había amplio consenso, al menos en Ford, de que el reglamento debía tener una pulida. La ACTC viene pensando hace tiempo en "mantener la paridad" aunque eso implique clasificaciones con 10 o 15 autos en el segundo, y luego series y finales con desempeño mediocre.

De esto hablamos muchas veces y no viene al caso volver sobre nuestros pasos. Lo curioso es como en tiempo récord se da por sentado que ha cambiado el panorama y como el departamento técnico de la categoría probo cambios sin hacer una prueba comparativa con lo que podía pasar con las otras marcas.

También el interrogante es, si un auto anda bien con un reglamento técnico desfavorable a su marca, porque debería modificarse el mismo si se supone, estando dentro del reglamento claro esta, logra resultados. Al menos así fue con Mariano Werner, amen de la sanción que lo margino de la pelea por el titulo del año anterior. Alguien podría dudar, con los equipos que representan a la marca, que ese nivel no era igualable al menos.

Sin embargo es menester que lo que se veía este año estaba lejos de lo visto por Werner o aun con Silva, tras su resonante triunfo en los 1000km del TC en 2017. Ford necesitaba cambios? es probable, pero cuanto era el nivel de esos cambios?

También se coincide que Dodge en 2017 no había tenido un torneo auspicioso, con lo mejor pasando quizás por Juan Martin Trucco, pero el caso del gran arranque de Castellano sea un aliciente, en este caso el cambio reglamentario no afecto, al menos en principio, el rendimiento de Chevrolet o Torino que pudieron pelear de igual a igual en las competencias, quizás Torino en menor medida, pero ahi la historia pasa por otro lado.

En eso tomemos el ejemplo del Torino Renault Team. Tenia todo, técnica y deportivamente, para lograr en 2017 la ansiada estrella que Torino esperaba tras casi cuatro décadas. La campaña de Facundo Ardusso, extraordinaria, sufrió quizás con las internas del equipo o la incomprensible estrategia en Rafaela, quizás la carrera que mas con el exiguo margen de puntos que le permitio a Canapino ser campeón sobre Ardusso, definió el torneo y en aquel momento le dio un triunfo que poco sirvió a Spataro.

Hoy el equipo vuelve a buscar a Claudio Garofalo, tras sindicarlo como responsable de la perdida del titulo en 2017, para mi en forma injusta, viendo los problemas internos y de comunicación, como un doble comando entre Renault Sport, a saber Alejandro Reggi y el equipo Trotta Racing, donde no se pone en duda los méritos deportivos, pero que le ha faltado para lograr el objetivo esperado no solo por ellos, sino por incondicionales fanáticos del gran auto argentino.

Aquí quiero revindicar a Jonny Laboritto. Creo que la interna del Renault Torino Team no merece ser atribuida  a la falta de rendimiento. Laboritto no tenia porque garantizar exclusividad y aun con el motor preparado al equipo de sus hijos que le permitio a Pernia ganar en San Luis o la reciente victoria de Benvenutti en el TC Pista el pasado domingo, nada puede escapar a ciertas deficiencias, que aun asi con todo, Ardusso se ha mantenido en los primeros lugares del torneo y probablemente ingrese nuevamente internarlo en la Copa de Oro. Y eso sin contar la des prolijidad de enterarse, por radio e Internet, que seria apartado de su puesto.

Ademas los pergaminos del preparador de Dolores, que destrono a otro gigante como Jorge Pedersoli en cuando a los motoristas de élite en el TC, aunque los mismo ahora estén limitados o hasta "sellados", podría tener altas y bajas, porque nadie es imbatible, pero como dice el flaco Traverso, hay todo un auto de carreras para echar la culpa por lo que no funciona y a la luz de lo visto, el motor no es una de esas cosas.

Ademas si la cuestión pasara por lo técnico, nadie dudaría que el año pasado los Torino fueron la fuerza dominante. Josito Di Palma gano tres carreras, y si bien se desplomo en los play offs, nadie dudaría que tuvo un gran auto, adivinen de quien era ese auto y equipo?? si era del Laboritto jrs.

En síntesis, a veces los problemas no pasan por lo técnico. Esto no significa que se deban omitir las modificaciones o revisiones pertinentes, pero a veces habría que analizar otras cuestiones. Ahora que pasa si en Posadas ahora aparecieran, diciendo hipotéticamente, 8 Chevrolet entre los 10 primeros o en termas cinco Torino adelante?. Y si todo se redujera a pensar que hay circuitos para cada marca, aun cuando hoy eso se relativiza producto de lo casi iguales que son los chasis y los motores, en teoría, en harás de la paridad pregonada desde Bogota 160.

A veces hay que mirar el bosque y no el arbol...

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