viernes, 28 de julio de 2023

#Opinión La ACTC ya gano


Foto Prensa JP Carrera

Hace más de una década, el Turismo Carretera, pese que nunca bajo del pedestal de la categoría principal a nivel nacional enfrentaba un paso clave. Salir de la zona de confort de abandonar la productora televisiva que fue aliada y pasar a la vereda de enfrente construyendo su propio poder. Enfrente estaba la CDA, el Super TC 2000 que prometía una revolución a partir de un potente motor pero con el defecto de base de traicionar su historia al abandonar su nombre y todos los sponsors y recursos que permitan contar con las mismas figuras que el TC y el apoyo de las fábricas.

Nada haría pensar que en poco más de diez años, su figura principal volvería para ser un show en sí mismo, construiría un hub de medios que superaría a su antiguo socio y un sistema de categorías que se retroalimenta a sí misma. 

El ahora rebautizado TC 2000 es un enfermo en terapia que no termina de evolucionar. Con apenas dos fabricantes oficiales, aferrado a la tabla de salvación que podría ser las SUV y la pérdida de nombres, equipos y marcas que ha repercutido en una crisis crónica que ni siquiera los Levy han logrado revertir.

Curiosamente ambas categorías tienen un nombre en común, Agustín Canapino.

El Titan gracias a sus éxitos y al crecimiento de su figura se ha convertido en el máximo exponente nacional. Sumado a las múltiples coronas en el Top Race, otra categoría que está lejos de sus mejores días, ha dado los pasos claves para cumplir su máximo anhelo. Llegar a Indy Car.

Esta claro que con el diario del lunes es más fácil. Pero el cuadro de situación de final del año pasado empujaron  los hechos. La salida de Chevrolet del TC 2000, la consolidación en el JP Carrera y la ingeniería publicitaria y económica aportada por Hector Martinez Sosa, el almamater tras la partida de su padre Alberto, pasos claves para un propósito que gracias al esfuerzo clave de Ricardo Juncos y el espaldarazo de la ACTC, frente a la presencia testimonial de la CDA, hicieron el resto.

Pero la vuelta de Canapino, que será un road show en sí mismo, es todo un símbolo de lo que viene. Es el veredicto inapelable. La ACTC ya ganó.

Hugo Mazzacane no puede estar más exultante. Con una renovación encaminada, el entusiasmo generalizado y además el regreso de su máximo exponente que además dejó en claro su amor por la categoría que le dio el primer paso clave de su carrera.

Si le sumamos una estructura consolidada de seis categorías, más de 200 pilotos rankeados y un sistema que a pesar de algún debate en cuanto a la asignación de nombres, garantiza atractivo y efectividad. Y por supuesto su propia productora de contenidos. 

La paliza a la CDA fue demoledora. A tal punto que hoy todo el sistema de categorías nacionales con excepción del Turismo Nacional y el Turismo Pista esta en crisis. Una Fórmula Nacional en estado terminal, un Campeonato Argentino de Karting inexistente y bueno TC 2000 y Top Race con futuro incierto. 

Lo hoy en Tecnopolis es solo el comienzo. Salvo el universo del standard mejorado donde parece estar afincados las categorías mencionadas en la parte superior del párrafo anterior, las posiciones ocupadas por la entidad de Bogota 166 parecen consolidadas. Nadie hoy se pregunta en armar un SUV o si saldrán o no. Ya algunos olvidaron que el Top Race tendrá motores V8 en 2024¿?

El alguna vez pedestal regidor del ACA ha caído y si a eso se le suma la negación de la realidad por parte de Jorge Rosales, presidente de la entidad que la FIA reconoce como entidad regidora del automovilismo argentino, nos podemos imaginar el final de la historia.

Hace poco mas de 40 años el TC 2000 era el futuro y el Turismo Carretera una pieza camino al museo. Irónicamente y pese a su gran historia, la primera carece de un museo propio y el empuje de entusiastas en los últimos años rescato del olvido algunas joyas de lo que se consideró alguna vez "el automovilismo que viene". El TC tiene su museo pero también camina a su futuro. Un futuro que a diferencia de hace 40 años atrás se vio hoy en Tecnopolis y quizás en Diciembre se empiece a ver en San Juan.

Y pensar que todo comenzó con un cambio de pantalla...